Los 25

Empiezo a escribir a las 23:50, momento del día en el que tengo algo más de media hora libre y me paro a analizar que ha dado de sí. 

Ahora mismo estoy en Madrid, en el campamento que volvió a poner las cosas en su lugar y que hizo que toda mi vida siguiera un camino para nada planeado. Un camino no planeado que, como siempre digo, me ha dado la oportunidad de conocer a gente maravillosa, aprender y seguir creciendo como persona. Hoy, un poco más de un año después de haber empezado aquí, me levanto y recién llegado al comedor me encuentro como a 50 personas esperando para cantarme el “Happy Birthday”. Y lo único que me viene a la cabeza es la palabra amor. Y ése ha sido el sentimiento que he tenido todo el día con las múltiples muestras de cariño recibidas tanto por amigos y familia. Y la verdad es que me siento privilegiado. No se imaginan cuanto...

 

Sé que los 25 dieron mucho de sí porque esta vez los mensajes tienen un matiz diferente, muchos dicen que siga viajando, que siga con mis sueños, que vaya envidia sana...algunos hasta se atreven a decir que soy un ejemplo a seguir. Agradezco todo eso y la verdad que hoy me siento más pleno que nunca. No pretendo ser un ejemplo para nadie pero sí que perseguir lo que uno quiere y arriesgar algo más para ser felices debería ser una máxima en la vida de cualquier persona.  

Más que con todo lo bueno de los 25 (que estoy muy orgulloso y contento por ello), me quedo con todas las cosas no tan buenas, esas que no todo el mundo ve o sabe, por las que han supuesto un reto, por los problemas superados y los momentos que quise romper a llorar y volver a casa. Porque eso…eso es lo que ha hecho que lo otro haya sucedido.